En el artículo anterior te compartimos cómo iniciar un negocio de alimentos con mínima inversión, hoy te brindamos esta información para crear un negocio en general tratando de no invertir cuantiosas cantidades.
Si estás decidido a emprender es necesario seguir algunos pasos indispensables para no morir en el intento.
El mundo de los negocios está cambiando, los procesos para consolidar un emprendimiento también. Es importante fomentar ciertas reglas que a la postre te servirán para soportar los duros embates de sostener un negocio.
1. Tener una mentalidad ganadora
Si comenzamos con miedo, incertidumbre y con preocupación por lo que pasará después, tenlo por seguro que desde ya habrás fracasado, pero si empiezas el proceso de montar tu negocio con optimismo y actitud positiva, es altamente probable que irás cumpliendo los objetivos propuestos.
Nada mejor que una mentalidad ganadora para derribar todos los obstáculos que se presenten en el camino, en lugar de preocuparte por lo que vendrá, ocúpate de analizar todos los detalles para que tu negocio empiece con pie derecho.
2. Asumir un resultado nefasto
Para nada se contradice con el punto anterior, es necesario verse en un escenario en el cual, a pesar de todo esfuerzo y tu mentalidad ganadora, las cosas podrían salir mal. A veces pasa y frente a ello es necesario hacerte estas preguntas:
¿Podría seguir intentándolo?
¿Me causaría depresión el hecho de que las cosas no salieron como lo esperaba?
¿Pondría en peligro mis finanzas si no cumplo el objetivo?
¿Lo tiraría todo al tacho de la basura o podría resurgir?
Si asumes que el fracaso es una posibilidad real, y, aun así, puedas asumirlo sin que eso te cause un problema grave en tu vida, entonces estás listo para emprender tu propio negocio.
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3. ¿Cuál es tu idea de negocio?
Es importante desarrollar la idea de negocio, pues de ella dependerá en gran parte el éxito de tu emprendimiento. En necesario seguir estos consejos:
- No debes pensar que montas tu empresa solo para ganar dinero
- No olvidarnos que el objetivo de toda empresa es vender, pero también ofrecer un plus en cada compra.
- Tu no vendes lo que quieres, sino lo que gente desea comprar
- No esperes mucho tiempo para concretar tu emprendimiento
- Busca nuevos nichos de mercado
- Aplica tus habilidades a un campo nuevo
- Encuentra algo que no tenga innovaciones recientes
- Habla con los competidores
- Mezcla y crea: Pasea por los pasillos de una tienda de medicinas, una de hardware y una de juguetes y combina productos de cada una.
4. Tu propia investigación
Tu idea de negocio debe ser equilibrada con la realidad.
Para que una idea de negocio funcione, ésta debe tener tres factores esenciales:
- Un producto o servicio para ofrecer.
- Un mercado potencial
- La habilidad del emprendedor para introducir el producto en el mercado.
Tu idea de negocio debe resolver un problema o satisfacer una necesidad. En resumidas cuentas, ésta debe ofrecer algo que el mercado quiera comprar, de lo contrario se vuelve complicado.
Podrías validar esta premisa con estas preguntas:
¿Quién necesita mi producto?
¿Quién es mi cliente potencial?
¿Qué otras empresas ofrecen los mismos productos que yo ofrezco? ¿Quién es mi competencia?
¿Por qué elegirían mi producto en lugar del producto de la competencia?
5. Un estudio de mercado realista
Si tienes pensado sacar un producto al mercado para su venta online, por ejemplo, solo debes pedir un pequeño número de unidades antes de realizar una fuerte inversión.
No hay mejor plan de negocio y estudio de mercado que pasar directamente a la acción y enfrentar tu idea de negocio en el mercado. Elabora tu estrategia de ventas, bien sea a través de publicidad en redes sociales o dirigiendo tráfico a tu página web.
Analiza y mide todos los datos que puedas medir:
- ¿Cuánta gente ha hecho click en tu anuncio?
- ¿Cuántas personas han acabado viendo más información acerca del producto?
- ¿Cuántas personas han mostrado su interés de compra?
Y lo más importante… de todas esas interacciones:
¿Cuántas personas han acabado comprando?
Ese es el verdadero plan de negocio. Y para los más avanzados y arriesgados, esto se puede hacer incluso sin tener un producto.
Es decir, puedes tener pensado vender un producto y simular que lo tienes. Realizar una campaña de publicidad y ver cuánta gente llega hasta el final del proceso de compra. Después solo tienes que decirle que te has quedado sin stock y que tardarás “x tiempo” en tener más unidades.
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Esta práctica cada vez es más utilizada antes de hacer una fuerte inversión.
6. Es necesario un plan financiero
El hecho de contar con un capital siempre será importante, porque no siempre las cosas salen como lo esperaste, en ocasiones los gastos son más grandes de los que calculaste y los ingresos menores de lo que pensaste.
Varios negocios quiebran precisamente por falta de liquidez.
Una estrategia vital para la supervivencia de un negocio es entender y prepararse para realizar una inversión inicial antes de generar beneficios, tener calculado de dónde va a salir el capital necesario para cubrir gastos corrientes antes de tener ganancias.
No es aconsejable emprender en tu negocio si no tienes un fondo de emergencia (o una estrategia de recaudación de capital) capaz de cubrirte al menos 12 meses de costes fijos y variables del negocio.
Sabemos que hemos mencionado el hecho de comenzar un negocio con mínima inversión, pero siempre es importante este fondo de emergencia. Además, el negocio en sí debe empezar a generarnos dinero para aumentar el capital y seguir creciendo como empresa.
No obstante, es bueno contar con varias formas de financiamiento:
Financiación típica
Pedir dinero al banco en forma de préstamo.
Subvenciones para pequeñas empresas
Echa un vistazo a las subvenciones existentes en tu ciudad o país para la pequeña empresa.
Inversores de capital riesgo
Los denominados “inversores ángeles”, una figura cada vez más extendida en España y que suelen arriesgar en ideas de negocios relacionados con la tecnología.
Crowdfunding
Sin duda, una elección muy común hoy día para financiar la puesta en marcha de una idea de negocio.
7. Cómo será la estructura de tu negocio
¿Quieres ser el propietario único? ¿Quieres comenzar tu negocio como sociedad? ¿Responsabilidad limitada? ¿Corporación?
La forma jurídica que elijas afectará a muchos factores, desde tu responsabilidad civil hasta la forma en que declaras tus impuestos. Por ello no debes escatimar en consultar con un asesor para que te exponga sin prejuicios qué forma jurídica te conviene en función del negocio y mercado que quieres abarcar.
En este sentido, sí que merece la pena hacer una primera inversión en un experto en este tema y temas fiscales. Te ahorrarás calentamientos de cabeza en un futuro.
Hasta aquí la primera parte de este proceso importante para montar un negocio con pocos recursos, revisa la segunda parte desde este enlace: 15 pasos fundamentales para la creación de tu negocio en su segunda parte
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