Cuando un emprendedor se dispone a superar obstáculos, lo logra sin pretextos y pese a las circunstancias, crisis o pandemia.
Muchos negocios se formaron durante la pandemia, luego que la economía se vio afectada mundialmente alrededor de este problema de salud.
El confinamiento y muchos otros factores económicos, sacaron lo mejor de sí de estos emprendedores, que no dejaron que la crisis los superara.
Te compartimos estas 20 experiencias extraordinarias de tenacidad para levantarse en medio de una crisis mundial.
1. Emprendedor digital
Ben Gulliver, un joven inglés perdió su trabajo al iniciar la pandemia, lejos de desesperarse, se ingenió un novedoso producto dental al que era difícil acceder por el confinamiento.
Este negocio le permitió hacer hasta 16 mil dólares en un día. Lo vendió a un inversionista y con este dinero comercializó otros productos en Amazon.
Gulliver obtuvo ingresos por hasta por 270 mil dólares.
Según el periódico británico The Sun, el joven logró generar un millón de dólares en solo 10 meses. Para lograrlo, requirió una computadora, un teléfono y conexión a Internet.
2. Postres de frutas
Camilo Escobar, un joven ecuatoriano que perdió el empleo durante la pandemia, no se rindió y empezó a elaborar pies de frutas, siguiendo recetas de internet.
Al poco tiempo creó su propia marca, La Ternura.
En los primeros meses empezó vendiendo alrededor de $50,00, pero ahora supera los $500,00.
No obstante Escobar, buscó impulsar aún más su negocio y encontró un aliado estratégico con el que empezó a potenciar su emprendimiento.
No existen barreras, ni miedos cuando quieres superarte y desafiar, incluso las situaciones más apremiantes.
3. Promotor de pequeños negocios
Precisamente la empresa Fenix, es la encargada de promocionar el emprendimiento anterior, al igual que lo hace con otros negocios que se han sumado.
Esta idea surgió en la pandemia, debido a que muchos empezaron a emprender, pero no contaban con una planificación adecuada.
Fenix, ofrece asesorías a emprendedores, servicio a domicilio, promoción en una tienda virtual y en redes sociales.
Fernanda Zaldumbide, dueña de Fénix, cuenta que el sitio comenzó con tres emprendimientos y actualmente trabaja con más de 40.
La mayoría corresponde al rubro de alimentos.
4. Un gimnasio compacto
Al emprendedor Daniel Díaz, no lo detuvo la pandemia y decidió abrir su propio negocio. Su idea siempre fue montar un gimnasio.
Él y su esposa no pudieron obtener un préstamo en ninguna institución, por lo que determinaron utilizar sus propios ahorros.
Compact Fitness, ofreció sus primeras clases con apenas un alumno, hoy han crecido y decenas de personas se inscriben para mantenerse en forma.
“Decir que estaba asustado sería quedarse corto. Debido a que no pudimos obtener ningún financiamiento, era nuestro dinero lo que estábamos arriesgando. Vaciamos los ahorros y cruzamos los dedos. A final de cuentas, sólo hay una forma de averiguarlo. Tienes que confiar en ti mismo y en tu proceso”.
Daniel Díaz5. Frutas y verduras a domicilio
El negocio de frutas y verduras lleva apenas tres años y con esto de la pandemia, las cosas se pusieron difìciles, pero esto no fue obstáculo para Natalia Peris, quien junto a su socia se reinventaron.
Ahora trabajan bajo pedido y entregan a domicilio, coordinando con los productores locales para que finalmente todos salgan ganando.
“No teníamos ningún sistema de domicilios organizados, así que tuvimos que movernos a encontrar un servicio de bicimensajería”, explica Peris.
“Nuestras ventas han subido tres veces de lo que eran. Ha pasado de ser un negocio que se mantenía como podía poco a poco a vernos por primera vez con un volumen de ventas grande”, describe.
6. Comida, golosinas y juguetes para mascotas
Rebecca Morgan, de 33 años, siempre tuvo la esperanza de abrir una tienda minorista para que sus clientes tengan la oportunidad de encontrar comida, golosinas y juguetes para sus mascotas.
Además de paseos y cuidado de perros.
Durante la pandemia observó que la gente buscaba compañía en casa y comenzaron a comprar y adoptar nuevas mascotas.
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“El mercado era potencialmente más grande y no quería perderme eso”, manifestó Morgan.
Ella financió la apertura de la tienda con ahorros y un préstamo de la Administración de Pequeñas Empresas de EEUU.
7. Restaurante comida mexicana vegana
“¿Quién está iniciando un negocio de restaurantes en medio de la pandemia?”, se preguntaba Ivan Kumamoto, quien no descartó esta idea, a pesar de que era muy arriesgado con todo lo que estaba sucediendo.
Contrató a un chef en Craigslist y comenzó a desarrollar recetas de platos mexicanos como pozole verde vegano y pollo con salsa de mole de almendras.
Pepita Meals abrió sus puertas a los clientes en diciembre y hacer crecer el negocio ha sido un desafío.
Inicialmente, Kumamoto esperaba entregar grandes lotes de pedidos a las oficinas, lo que minimiza los costos de envío y brinda publicidad gratuita.
No obstante, con las oficinas todavía en gran parte abandonadas, cambió a la entrega a domicilio, ayudado por las redes sociales.
La compañía está creciendo paulatinamente y generalmente recibe pedidos de 21 a 25 comidas a la semana.
8. App de pan a domicilio
Sin esta pandemia, la aplicación creada por el argentino Antonio Bertasio, Quiero Pannet, para repartir pan a domicilio no tenía tanto éxito como se esperaba, pero hoy ha sido de gran ayuda para salvar su negocio.
En un principio fue pensada para distribuir a las grandes cadenas alimenticias, pero con esta situación tuvieron que reinventarse y llegar al público particular.
Los medios se han interesado por informar sobre esta aplicación y entonces fue el punto de partida para el crecimiento de esta empresa.
Hoy cuenta incluso con un equipo especializado en e-commerce directamente enfocado en la expansión y crecimiento, teniendo como base lo digital.
9. Diseños en tiempos de crisis
Ryan Glynn, perdió su trabajo en una empresa de atención médica, pero esto no puso freno a su ímpetu de superar a como dé lugar la crisis.
Entonces Glynn, de 27 años, decidió abrir una tienda de plantas, porque se dio cuenta de que las personas se interesaban por las plantas de interior mientras estaban en casa.
Glynn agotó sus tarjetas de crédito para ordenar plantas de Florida y abrió en septiembre.
Chicago Plants fue rentable en tres meses. Muchos clientes descubrieron la tienda a través del boca a boca y las fotos en Instagram, dijo Glynn.
“Hemos tenido muchas personas que han venido y dicen que nunca tuvieron una planta de interior y ahora se interesan en ellas”, mencionó Glynn.
10. Inglés a otro nivel
La crisis a nivel mundial ha puesto sobre la mesa muchos desafíos, uno de ellos es la educación.
Esto lo supo aprovechar José Antonio Manguira, que llevaba un tiempo pensando montar una academia de inglés.
La suspensión de las clases, antes del confinamiento, fue la señal que precipitó todo.
Fue así que comenzó su primera clase online en Ikademia.
“En ese momento no teníamos ni miedo de empezar porque lo único que queríamos era ayudar, el vértigo vino después”, reconoce el directivo.
“La crisis ha dado madurez a la sociedad para ver que la educación online funciona”, recalca.
En ocasiones, los tiempos de crisis nos enseñan muchas lecciones que debemos aprender o aprender, no puede haber un luego, el momento es ahora.
Esta lamentable situación mundial nos ha traído un golpe duro a nuestras finanzas, pérdidas económicas e incluso pérdidas humanas.
Pero es deber de cada individuo no dejarse vencer y levantarse con más fuerza para lograr nuestras metas y objetivos.
Fuentes: Cinco Días El País | Maaji | PrimiciasEC | El Comercio Ecuador | BBC Mundo | Chicago Tribune | El Telégrafo
